Ya os conté mis planes de verano, una entrada muy bonita ¿verdad?, bueno pues de todo eso que conté solo me fui a Almuñecar… el resto de cosas se truncaron un poquito.
Primeramente, el viaje a Portugal-Galicia, una semana antes de la supuesta salida, me llamaron para decirme que el viaje se había cambiado de fecha porque no había suficientes personas inscritas y que iban a aplazarlo hasta el 17 de Julio para ver si se cubrían las plazas. Y no habrá días en el mundo (¿no dicen que hay más días que ollas?) que justo ese día tenía una boda superimportante, de esas a las que no puedes faltar. Así que… decidí cancelar ese viaje y por suerte me devolvieron todo el dinero (me lo han devuelto al mes…, y ¡¡porque mi madre se dio cuenta de que no nos habían hecho el ingreso!! Encima de que me dejan sin viaje me querían dejar también sin dinero). –No pasa nada- dije.- Todavía me queda Nottingham- ¡Ilusa de mí!
Tres o cuatro días después de esto, me compro mi billete de avión a East Midlands, ¡rumbo a Nottingham! La tierra de Robin Hood. Pero cuando escribo al coordinador para decirle que ya tengo el billete y la hora de llegada, me contesta y me dice que por problemas de la crisis (maldita crisis… ¿quién inventó esa palabra?) no tienen suficientes usuarios como para pagar al personal y por consiguiente no pueden tener el centro abierto. Permanecería cerrado hasta el mes de Septiembre, como mínimo. –Me quedo también sin viaje- Pensé. Pero me dieron la opción de irme a un centro muy parecido en un pueblecito muy cerca de Londres. Ellos me pagarían el transporte hasta allí, ya que mi avión seguía llegando a Nottingham. ¡Todo solucionado! ¿no?
Pues efectivamente, NO. Era un miércoles, justo el día en que iba a escribirles de nuevo confirmándoles que aceptaba la opción que me proponían y que me cambiaba a Londres. La ciudad me encanta aunque ya la haya visto bastantes veces, pero seguro que me quedan millones de rincones por conocer.
Me desperté sobre las 10 de la mañana y veo en mi móvil una llamada perdida de mi madre, -¡Qué raro!- pensé, y cuando iba a llamarla a ver que quería, de repente se abre la puerta de mi dormitorio y aparece mi madre diciéndome que nos vamos al hospital con mi abuelo que estaba pachucho. Abajo, en su casa estaba ya el médico. Ella se iba en la ambulancia y yo iría en el coche.
Yo, que soy tan valiente, salgo a correr para abajo a ver qué es lo que ha pasado, sin desayunar y sin meterme nada al cuerpo. Yo que soy tan lista, sabiendo que yo estas cosas sin nada en el cuerpo no las aguanto… y llego abajo y en cuanto vi el suero, me empezó un sudorcillo frío, un temblorcillo de piernas y empecé a ver puntitos. ¡Joder, me estoy mareando! Y como no quería montar el espectáculo, disimuladamente entre todo el follón que se armó, subí a mi casa y, como pude, me hice el café más cargado que puede tomarse una persona. Aunque antes de tomármelo tuve que estar un ratito con la cabeza entre las piernas, sentada en una silla. (Pero de esto no se enteró nadie hasta horas/días después). Ya una vez recompuesta volví a bajar y, ahora sí, serví de ayuda en vez de “estorbo”. El resto ya lo sabéis. Infarto, mucho haloperidol, pillar cabras inexistentes, espantar a perros que nadie ve, vender mulas, coger cebada… vamos lo que es un “pim, pam, toma lacasitos” en toda regla. Después las cosas se fueron complicando, y ahora, por lo pronto volvemos a estar en casa, un poco más dependientes de lo que nos fuimos.
Es de entender, que con esa situación pensara: “¿Cómo me voy a ir de voluntaria? ¡si me ha salido el voluntariado en casa!” (Algún día contaré algunas de las aventuras hospitalarias) Y así fue como se canceló también mi viaje a tierras inglesas.
Ya veis, del verano que tenía planeado, a lo que ha quedado hay una “sutil” diferencia. Ya se sabe que las casualidades no existen, y que todo pasa por algo. Así que visto así, posiblemente “algo” tendría que hacer yo este verano en mi pueblo o para “algo” servirá todo esto ¿no?... Y, si no es así, la verdad consuela mucho pensarlo.
…
El miércoles pasado volvimos. Y el jueves, mientras comíamos, mi madre le dice a mi padre… “Que inocente es, ¿a que sí?”. ¡Ey! ¡Ey! ¡Ey!, un momento, ¿qué esta pasando aquí? ¿Qué me estoy perdiendo? (risas por parte de ambos)/ (mosqueo por mi parte). Y minutos después de hacerme rabiar un poco me sueltan: QUE TE ESTAMOS COMPRANDO UN COCHE. Mi cara de shock debió ser indescriptible…, solo sonreí y no fui capaz de decir casi nada. Eso fue el jueves a medio día… y 24h después tenía en mis manos las llaves de un GOLF gris perla, increíblemente nuevo para ser de segunda mano e que me queda increíblemente bien. (jajaja).
Mi señor padre, que es más infantiloide que yo, si cabe. Se lo quería llevar a una comida sin ni siquiera dejarme verlo. Pero ¡conseguí imponerme! No creáis, que no me dejo conducirlo. Solo me monté, lo flipé un ratito… y ¡¡¡¡se lo llevó!!!! SE LLEVO MI COCHE. EL mismo que un rato antes me había dicho, que no se podía coger en todo el fin de semana porque había que arreglar algo del seguro. Unas tres horas después, por fin volvió y pude conducirlo (pero un ratito pequeño, no os creáis) y descubrir lo cómodo y lo infinitamente chuli que es… y que es “mucho más coche que el famoso saxillo”. Pero después de volver de mí “vuelta de estreno”, el coche quedó confiscado en mi cochera, de donde no puede salir hasta mañana. Ahora solo puedo entretenerme en abrirlo, cerrarlo, escuchar música y mirarlo. Jajaja. ¡Que, otra cosa no, pero música si puedo escuchar! Vaya equipo de sonido que lleva el coche. Su anterior dueño, era el típico que le gusta llevar el coche arreglaillo y ¡no os quiero contar nada!
Por ahora estas son todas las novedades, ya os iré contando como sucede lo que queda de verano.
PD: Las fotos próximamente, que no las tengo en este ordenador.


5 comentarios:
Después de la tormenta viene la calma, o eso dicen, no? Pos a ti en vez de la calma te ha venido la locura, porque ya te veo "dándole voz, y bajando las ventanillas pa' vacilar"...jajaja
Sabes que me alegro mucho que las cosas estén mejorando...y que por lo menos este verano tenga más posibilidades de verte que las que iba a tener! (algo bueno hay que sacar de que no t vayas, no?)
Y ya me despido, que parece que estoy escribiendo una entrada en vez d un comentario!!
Un besazoo
Siento una profunda envidia por ese coche, aunque más envidia siento por ese equipaco de musicote!!!! arg!! jajaaj en verdad te lo mereces!! y lo sabes! ^^ ya me darás una vueltaca de esas de "miedo" entre las alamedas de casti pa hacer fotos y escuchar "cosas raras" moviendose entre la maleza... jaja
besoteeee
Mi pareja se llama Felisa y le llama todo el mundo Fely también, me ha alegrado ver tu blog. un beso
QUIERO UN CIGARROOOOOOOOOOOOO
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