Miscelánea

¡La de tiempo que hace que no actualizo! Pero es que hemos tenido que volver a la rutina, después de todo el parón navideño. Pero ya estamos al 100%, la Navidad queda ya muy lejos…


Como hace tanto tiempo que no escribo, escribiría páginas y páginas sobre un montón de cosas, pero claro, hay que elegir porque no se os puede cansar. Y además hay que hacerlo de una forma más o menos organizada porque algunas cosas no tienen nada que ver con las otras… así que me he buscado la forma de hacer “puntos y aparte” para que las cosas no queden como un mosaico abstracto, sin forma y sin conexión entre los elementos. Y la fórmula va a ser la siguiente… Una foto que haga de introducción al tema a tratar y que a la vez separe las distintas ideas que quiero expresar.

Esto, es lo que me ha hecho realmente plantearme actualizar el blog, la impotencia que me creó un hecho en concreto, me hizo reflexionar sobre cómo cumplir años nos enseña tanto…. ¡y lo poco que lo valoramos!

Concretamente ayer, cuando llegué al centro de día donde trabajo (donde por cierto, cada día estamos menos…) la auxiliar (cuya identidad me guardo) y las mayores que van al centro estaban enfrascadas en un “debate” sobre política… y me pareció interesante quedarme a formar parte de algo que seguramente me enriquecería. Porque son puntos de vista distintos, con muchas más vivencias que las mías propias que seguro merecería la pena escuchar.

Pues bien, me quedé totalmente alucinada al descubrir como una persona de 83 puede tener la mente más abierta que una de 40…, cómo, personas que ha vivido una guerra civil y tienen unos ideales realmente firmes (la mayoría basados en la más pura derecha) son capaces de ver todas las perspectivas y respetar otros ideales ¡incluso ver la parte buena de ellos! La incultura a veces, hace que nos estanquemos en una manera de pensar la cual defendemos con uñas y dientes aunque a veces la defensa sea totalmente ilógica. No por el tema tratado, sino por los argumentos que se usan:

-Auxiliar: Los “moros” van a invadir España. Porque fíjate, que están viniendo poco a poco haciéndose los inocentes… y cuando nos demos cuenta vamos a estar invadidos.

-Feli: Pero ¿te has planteado alguna vez, que hubo un tiempo en que los cristianos vinimos a invadirlos a ellos? Te hablo de los Reyes Católicos, sin ir más lejos.

-Auxiliar: No los invadieron… ¡¡porque España siempre ha sido de los españoles, desde que los prehistóricos!!

Y llegado ese momento, decidí dejar el tema… porque pensé que esta mujer y los libros de historia no habían estado cerca nunca. Pero evidentemente, ella no se quedó a gusto, tenía que seguir con su argumentación sobre la “invasión" a la que estamos sometidos. Y en su análisis, descubrió, que ¡vaya país en el que vivimos! Que vas por la calle y te encuentras chinos, negros, sudamericanos, rumanos (que son más malos que nadaaaa) y que (argumento muy escuchado pero no por eso me indigna menos) ESTAN VINIENDO A QUITARNOS EL TRABAJO. ¡Ahí lo llevas! Cuando esta gente ha venido a hacer el trabajo que en tiempos de “prosperidad económica” los españoles no hemos querido hacer, porque nos parecía rebajarnos demasiado… y ahora que han llegado las vacas flacas, nos están estorbando. Total, que a esto le respondí, que a mí me parecía que esto está suponiendo una gran riqueza cultural y en valores para nuestros hijos…. ¡¡¡¡¡Y AHÍ VINO LA ECATOMBE!!!!!! ¿¿¿¿¿¿A mis hijos????? ¿Qué riqueza? Que nada más que están trayendo virus que se los pegan los negros… . Llegados a este punto, respiré hondo y me fui a trabajar. Y cuando estaba preparando la sala de fisioterapia, oí como las mujeres mayores, de las cuales sería entendible esta actitud… seguían intentando que entrara en razón, esta contradicción solo hizo que sonriera irónicamente, pensando en todo el camino que queda aun por recorrer.

Por otra parte, aunque hablar del tiempo sea un tema muy socorrido en el ascensor o en ambientes en los que el silencio se torna incomodo. Tengo que decirlo. POR FIN HEMOS VUELTO A VER EL SOL. Y por consiguiente, mi humor ha cambiado drásticamente… dan ganas de salir a pasear, la ropa se seca en un solo día y no necesita una semana (que entonces pierde el olor al suavizante y no hay cosa que me dé más rabia) y subir al inglés no se convierte en una odisea acuática. Reír es más fácil cuando el sol te da en la cara… y si no, fijaros en el gesto que hacemos cuando nos deslumbra un rayito…. ¿no se parece un poco a un inicio de sonrisa?

Y como colofón, voy a hablar un poco, de mi reto este que empecé hace 3 meses y medio ya… que parece que fue ayer… . Mi dieta. La verdad, sigo llevándola bastante bien. Con algún pecadillo de vez en cuando, que a veces una siente que “tiene un agujero negro en el estómago” que se está tragando todo lo que le echas y no hay manera de controlarlo… llegados a ese momento hay que taparlo, no vaya a ser que le dé por crecer y me reabsorba. Así que antes de llegar al punto de no retorno, yo lo hago desaparecer con alguna “cosa prohibida”. Los momentos más difíciles son los días que mi señora madre viene (eso se traduce en todos los viernes por la noche) que salimos y por mucho que lo intente, al final la termino liándola. Pero es verdad que creo que estoy aprendiendo a comer, porque al día siguiente se como compensar lo que hice la noche anterior, con un poquito de piña y pollo, con una cremita de espárragos o en mi lugar preferido para acallar la conciencia EL GIMNASIO. No hay nada mejor que una clase de SPINNING, en la que sudas como una perra, para sentir, que aquel bocadito que le diste ayer a algo que alguien se estaba comiendo, ya está más que desaparecido. Y ¿cuál ha sido mi “propósito de año nuevo”? Pasar de una hora a dos de ejercicio al día… y la segunda dedicarla a tonificar y esas cosillas: ¡para tener un culito prieto vamos! Nuevo objetivo: Mis abdominales… que están totalmente fofos, pero no solo fofos, ¡NO!. Como se dice en el argot fisioterápico están HIPOTONICOS, porque no tienen fuerza ninguna. Así que ese es el nuevo planteamiento. Ya iré poniendo qué tal. Por lo pronto llevo dos días con las dos horas y las agujetas me tienen totalmente colonizada. Pero bueno, contra las agujetas… más ejercicio, es la única solución

Por cierto, si alguien no ha visto aún Avatar, ya está tardando en ir al cine… es preciosa y las imágenes en 3D… ¡impresionantes!